“Sabemos” o
creemos que la policía es el ente gubernamental encargado de velar por la
seguridad e integridad del ciudadano.
Pero
como pretendemos acabar con el flagelo de la corrupción, cuando la cifra de
corruptos en dichas entidades sobre pasa un 50% y el resto se corrompen día a
día.
Aun
así sigo creyendo en aquellos que aunque pocos actúan conforme a la ley e hacen
una ardua labor. Pero lastimosa mente, la mayoría siempre trataran de corromper
a la minoría.
Siendo
detenido por Deambular* “Tarde de la noche 8:30”, por las calles de Bogotá fui
sindicado de “NO SE QUE”, porque no se me dio un respectivo dictamen, pasando
así una larga y muy fría noche en la U.P.J Bogotá “Unidad Permanente de
Justicia” a lo que yo llamaría U.D.I “Unidad Diaria de Injusticia” por lo visto
y vivido…

¡Quítese de ahí MALPA**** no se le
olvide que esos son ratas! Refiriéndose a los indigentes, vulnerando así la
integridad de ambos, me pregunto yo:
¿Cómo
podemos llamar esto Unidad Permanente de Justicia, cuando a primera vista
notamos desigualdad de mandos?
¿A
caso es con esta mentalidad deplorable que las instituciones enseñan a sus
estudiantes?
Luego
ingrese a la celda de requisas, donde los oficiales desnudan a los presos en
busca de armas y drogas lo cual es lógico y aceptable, debido a la violencia
que mental mente influyen sobre los presos, lo que no es lógico y mucho menos
aceptable es que dicho oficial tome poderes que no le corresponden y golpee a
los internos con mano dura y arrojando al suelo sus pertenencias “las del preso
claro esta” no solo maltrato físico si no verbal y mental, esto debido a su
condición social, que en este país se ESCALAFONA por parte de sus pertenencias
de 1 a 10. Reteniendo parte de sus pertenencias y decomisando sus drogas son
pasados a la jaula mayor.
Pisos
y pareces húmedas y corroídas por el orín, bancos de metal frio, y sin aseo
alguno, “son parte de la casa de quien allí llega” según la policía.

comprar por el doble o el triple, la droga que momentos atrás fue decomisada. Una agente se encarga de venderla en un valor de 7.000$ 10.000$ un bazuco 5.000$ y lo más lamentable un cigarrillo te puede llegar a costar 1.000$ Pesos colombianos, eso te cuesta una sobra de arroz que un agente con menos rango pasa vendiendo.
Convirtiéndose
la ley en propia indigencia, unos por vicio, otros por dinero, y sin mucho
análisis pasan a ser parte de un mismo estrato social -1, la única diferencia
sus ropas limpias pero ¿y sus mentes?
Después
de una larga noche sin comer viene un largo y entero día de espera, PERO NO
TODO ES MALO… llega el médico que valora a los enfermos… un ACETAMINOFEN, un
examen dental pero ningún seguimiento ni valoración de órganos, tratan de
limpiar las culpas de lo sucedido con un pan y un chocolate y un Cristo les
ama, falso es esto que a muchos les vende la sociedad, ni medico ni cura
existen en la vida de esta gente, solo existe un Dios al que muchos ya
renunciaron.
Si le
damos un vistazo a la calle este circuito de indigencia y policía siempre va a
depender el uno del otro. Las llamadas ollas o centros de expendio de drogas
que constituyen el llamado micro tráfico que abundan en nuestros barrios y
centros de las ciudades, son cuidados por muchos policías que obteniendo
jugosas ganancias económicas, cobran lo que común mente llaman vacuna, con la
condición de que la indigencia no se puede exterminar porqué no habría quien
compre dicho producto.
Cada
olla paga alrededor de 200.000$ por cada semana, teniendo en cuenta que en 304
cuadras hay 2 ollas las ganancias son jugosas para los celadores nocturnos, lo
único que pueden hacer es tratar de darles un escarmiento internándolos 24
horas en la U.P.J y no importando si por este centro pasa un padre de familia,
o persona trabajadora que sea víctima de lo que yo llamo una pesquisa humana
nocturna.
Después
de 18 horas Salí ileso gracias a Dios pero sin muchas pertenencias, todas
fueron robadas por la U.P.J
No hay comentarios:
Publicar un comentario